secreta, tez aniñada;
su llama, su resplandor
aparece por la tarde.
Tengo una canción azul,
azul como una campana,
con un duende que sonríe:
viene contento y descalzo.
Tengo una canción azul,
¿y quién quisiera escucharla?
--Por mis dedos corre un río
secreto, luz y penumbra.--
18/7/1996
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